Las más famosas practicantes de Pole Dance han
aprovechado para reivindicar una vez más que este deporte debe ser considerado
como una disciplina olímpica más en los próximos juegos de Río de Janeiro de
2016.
Aprovechando la
celebración de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 la comunidad de
practicantes de Pole Dance Deportivo han vuelto a hacer un llamamiento para que
la llamada Barra Americana sea considerada como un nuevo deporte olímpico en
los futuros juegos de Río 2016. Ya en 2010 un grupo de abogados presentó una
propuesta al Comité Olímpico Internacional con el fin de acceder a un test en
los juegos de Londres 2012. Finalmente el Pole Dance no fue disciplina
olímpica, pero sí que se celebro en la capital inglesa el Primer Mundial de
Pole Dance Deportivo, lo que significa un gran paso adelante para esta práctica
deportiva.
Sin duda el mayor
problema que presenta esta intención de ser deporte olímpico es que en seguida
se asocia el Pole Dance con el streaptease y el destape, así lo admite la
fundadora de la Federación Estadounidense de Pole Dancing, Wendy Traskos, al
decir que “que esta disciplina se relación con strippers será algo difícil de
superar”. Pero en su defensa argumentan
que “la única diferencia que existe entre la gimnasia artística y el “pole
sport” es que en la primera los ejercicios se realizan en la barra fija,
mientras que aquí la barra esta en vertical”.
Lo cierto es que se
puede ver a simple vista que es un deporte muy físico, que requiere de mucha fuerza
y coordinación ya que como afirma la profesora de pole dance de Los Angeles,
Sandra Huffman, “estás levantando el peso de
tu propio cuerpo y uno controla sus propios músculos y su cuerpo para
hacer los movimientos a la perfección y de forma segura”.
En caso de que
finalmente se aceptara la propuesta de incorporar el Pole Dance como disciplina
olímpica en Río 2016 lo más probable es que su práctica se llevara a cabo en la
playa y con sensuales bikinis, lo que no ayudaría demasiado a alejarlo de su
relación con las strippers, pero se asegura que este deporte sería regido de
una forma incluso más estricta que en el resto de disciplinas.
El presidente de la
Asociación rusa de Organizaciones de Baile, Andréi Kokoulin, es uno de los
grandes defensores de la rigurosidad de este deporte: “es muy espectacular. El
jurado estará compuesto por diez personas: tres evaluarán la técnica, tres la
forma artística y 4 la coordinación de los movimientos, lo que haría que fuera
más riguroso que algunos de los deportes olímpicos existentes”.
Por su parte, la
campeona de la Federación Estadounidense de Pole Dancing, Natasha Wang, no es tan
optimista. Declara que su postura “siempre ha sido apoyar los esfuerzos de la
comunidad de incluir el Pole Dance en las Olimpiadas” pero se confiesa que no
cree “que el público general esté listo para este deporte aún” debido a los
prejuicios ligados a la práctica del streaptease en barras americanas.